INTRODUCCIONCada día el consumidor demanda más
información en cuanto a los alimentos que consume interesándose tanto
por su composición, calidad como en todos los aspectos que estén
relacionados con la seguridad alimentaria. Esto hace que cada día las
empresas se esfuercen mucho más en prevenir y reducir los riesgos
asociados a los productos alimentarios mejorando día a día sus procesos
con exigentes sistemas de calidad.
A pesar de estos niveles de
control, no existe el riesgo cero y es importante disponer de toda la
información posible relacionada con alertas y riesgos emergentes.
Las
notificaciones del Sistema de Alertas Rápida para Alimentos y Piensos
de la Unión Europea (RASFF) se clasifican en cuatro tipos:
Alertas:
se envían cuando un alimento o pienso que representa un riesgo grave
para la salud está en el mercado y se requiere actuar de forma urgente.
El miembro del sistema RASFF que identifica el problema y toma las
medidas pertinentes (p. ej., retirada de un producto) es el que activa
la alerta. La notificación tiene como fin proporcionar a todos los
miembros del RASFF la información necesaria para que puedan confirmar si
el producto en cuestión está en su mercado, para que ellos también
puedan poner en marcha las medidas necesarias.
Rechazos en Frontera:
se producen cuando una remesa de alimentos o piensos se analiza y
rechaza en una frontera exterior de la UE (y el Espacio Económico
Europeo) por haberse detectado un riesgo para la salud. Las
notificaciones se envían a todos los puestos fronterizos del EEE con el
fin de reforzar los controles y garantizar que el producto rechazado no
vuelva a entrar en la UE a través de otro puesto fronterizo.
Notificaciones
Informativas: se usan cuando se identifica un riesgo en un alimento o
pienso que está en el mercado, pero los miembros del RASFF no tienen que
actuar de manera tan rápida. El motivo es que el producto no ha llegado
a sus mercados, ya no está presente en los mismos o porque la
naturaleza del riesgo no requiere actuar con rapidez.
Noticias:
Cualquier información relacionada con la seguridad de los productos
alimentarios y de piensos que no se comunique como una notificación de
alerta o informativa, pero que se juzgue de interés para las autoridades
de control, se transmite a los miembros bajo el epígrafe «Noticias».

En
relación a las notificaciones de alertas, son efectuadas por
incumplimiento de la normativa comunitaria o nacional y puede ser
trasladado a Aesan (Agencia de Seguridad Alimentaria, ahora Aecosan
Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición) a través
de Rasff (notificaciones por los Estados Miembros) o por parte de las
Autoridades Competentes de las Comunidades Autónomas. Aecosan recepciona
la notificación, realiza la valoración y la clasificación en niveles de
la notificación.
A partir de este momento se recoge una
información mínima relacionada con las características del producto,
origen, peligro, medidas adoptadas, información de trazabilidad y
responsabilidad de los operadores económicos. Si el producto no cumple
con los requisitos de seguridad, se realiza la retirada de producto si
la mercancía no ha llegado al consumidor. En el caso de que haya llegado
al consumidor, se informa a las Autoridades Competentes y a los
Consumidores de las razones de esta retirada y se recupera el producto,
en la medida de lo posible, cuando otras medidas no son suficientes para
alcanzar un nivel elevado de protección de la salud.
A
continuación se detalla el resumen de alertas y notificaciones recogidas
a través del Sistema de Alertas Rápida para Alimentos y Piensos de la
Unión Europea (RASFF) durante el año 2013 en productos alimenticios.
En
todo el año se han detectado 2641 notificaciones, de las cuales 527 han
sido alertas, 1214 rechazos en frontera y el resto notificaciones
informativas y noticias. Al comparar los resultados con el año anterior,
se observa como el número de notificaciones han disminuido en 169
(2012: 2810 notificaciones) a diferencia de las notificaciones por
alertas que han incrementado con respecto al año anterior en 61 (466
alertas en 2012). El resto se clasificaron en 1464 rechazos en frontera y
880 notificaciones informativas y noticias.
ALERTASProductos alimenticiosLos productos en los que se han detectado mayor número de alertas han sido los siguientes:
- Productos de la Pesca y Derivados
- Cereales, Productos de Panadería y Aperitivos-Snack
- Frutas –Hortalizas, Hierbas y Especies
- Productos de Carne y Derivados
- Leche y productos Derivados
- Frutos Secos, Cacaos y derivados.
Estos
alimentos representan el 75 % de las alertas encontradas durante el
2013. El resto de alertas se han repartido en otro tipo de alimentos con
bebidas alcohólicas-no alcohólicas, alimentos dietéticos y complementos
alimenticios, huevos y derivados, grasas y aceites, aditivos
alimentarios, miel y otro tipo de alimentos.
Los alimentos con
mayor porcentaje de alertas detectadas han sido los productos de la
pesca y derivados con un 25%, seguidamente de frutas-hortalizas y carne y
derivados con un 14%.
Tipología de riesgos notificadosMayor Riesgo Alimentario presentado en Microbiología, seguidamente de Micotoxinas y Metales Pesados.
El
mayor porcentaje de riesgo alimentario detectado durante el 2013 ha
sido la microbiología con un 38% seguidamente de micotoxinas con 12%,
metales pesados con 12%, alérgenos con 8% y en menor proporción la
presencia de cuerpos extraños (5%), residuos de medicamentos
veterinarios (4,5%), residuos de productos fitosanitarios (2,6%),
biocontaminantes (2,6%) y contaminantes industriales (2%).
Microbiología:
Se han notificado 200 alertas por microbiología, la mayoría de ellas
por presencia de Salmonella fundamentalmente y otros como Listeria y
E.Coli. Los alimentos en los que se ha detectado este riesgo han sido
los siguientes:
Los alimentos más susceptibles de sufrir
deterioro por microbiología con los productos cárnicos y el pescado y
derivados. Estos microorganismos pueden producir intoxicaciones y otras
infecciones alimentarias como salmonelosis o gastroenteritis que pueden
llegar a ser muy perjudiciales para la salud.
En relación a la
fruta y hortaliza, las notificaciones han sido más elevadas en Vegetales
de hojas verdes (lechuga y espinacas en particular) en combinación con
E. coli patógeno y Salmonella spp. en verduras de hoja verde y tomates.
Salmonella en países terceros en melón y frutas tropicales como mango y
papaya.
En relación a los virus, novovirus y hepatitis A han sido los más destacados detectándose riesgos en frutos rojos.
Para prevenir este tipo de riesgos se aconseja las siguientes medidas en alimentos:
Frutas
y verduras: el tipo de agua de riego utilizada y, por otro lado, la
posibilidad de contaminación cruzada a través de las manos de los
operadores o de los utensilios utilizados.
Productos de la Pesca y
Mariscos: la presencia de virus en las aguas y la forma de conservación
de los mariscos hasta su consumo.
Carnes de Cerdo: el número de cerdos infectados por virus en el momento del sacrificio.
Micotoxinas: Las micotoxinas han sido el segundo riesgo notificado más frecuente en alimentos, con un total de 64 notificaciones.
El
43 % de las notificaciones se han dado en frutos secos, cacao y
derivados, encontrándose principalmente alertas de aflatoxinas
seguidamente de ocratoxinas. El 27% de notificaciones se han dado en
frutas-hortalizas,hojas y especies y el 22% en cereales y derivados.
Actualmente,
según la FAO, la aflatoxina es la micotoxina más peligrosa para la
salud, debido principalmente a su potencial carcinogénico para el hígado
humano, entre ellas la B1 seguidamente de la M1. A continuación le
seguiría la ocratoxina por orden de peligrosidad.
Metales Pesados:
Se han notificado 63 riesgos por metales pesados, el 73 % en pescado y
derivados siendo el mercurio el metal pesado que se ha detectado con
mayor frecuencia. Le sigue alimentos dietéticos con 22% y
frutas-hortalizas con el 5%. Además de mercurio, se han detectado otros
metales como plomo y cadmio.
Alérgenos: En alérgenos se
han notificado 44 riesgos, principalmente en cereales y productos
derivados de los cereales, y otros alimentos como sopas y preparados,
frutos secos y cacao. Los principales riesgos han sido ingredientes no
declarados de la leche, gluten, huevo, frutos secos, etc.
Medicamentos Veterinarios:
24 notificaciones encontradas durante el 2013 de residuos de
medicamentos veterinarios, las mayorías detectadas en carne y derivadas y
pescado. Los principales medicamentos encontrados han sido
phenylbutazone, sulfadiazine y nitrofuranos.
Residuos de Productos Fitosanitarios:
Se han notificado 14 riesgos por presencia de productos fitosanitarios,
entre los que destaca sustancias no autorizadas como carbofurano ,
dieldrin, nicotina en champiñón y sustancias activas que superan los LMR
(Límites Máximos Permitidos) como etefón en tomate cherry.
Actualmente,
la EFSA está estudiando los efectos acumulativos y sinérgicos de las
sustancias activas. Para ello, recomienda aplicar el Indice de riesgo,
medida del grado en que el residuo de una sustancia activa ingerida
través de los alimentos alcanza sus valores límites toxicológicos (IDA,
ARfD). Este es un método sencillo y rápido, lo que proporciona a los
consumidores una protección adecuada al mismo tiempo y puede ser
depurado paso a paso si es necesario mediante la inclusión de
información toxicológica adicional.
Otro método para evaluar el
riesgo que supone la exposición a múltiples residuos de fitosanitarios,
se basa en agrupar los compuestos que presentan propiedades
toxicológicas similares en un órgano o sistema específico.
Biocontaminantes:
En relación a los biocontaminantes, se han notificado 14 riesgos entre
las que destaca la presencia de histaminas en productos de la pesca con
un 80%.
Las principales causas de una intoxicación de este tipo
en pescado son debidas a una incorrecta manipulación del producto y a
rotura de la cadena de temperatura durante su conservación.
Contaminantes Industriales:
Se han notificado 11 riesgos por contaminantes industriales entre los
que destaca benzopirenos en grasas y aceites, y productos de la perca y
percloratos en espinaca fresca.
Los benzopirenos son
hidrocarburos policíclicos aromáticos potencialmente cancerígenos,
originado en la naturaleza y de manera artificial en los procesos de
elaboración de carnes asadas, frituras, alimentos ahumados y otros en
que la temperatura empleada sea superior a los 300ºC. Existe una
reglamentación que regula los niveles de benzopirenos en este tipo de
productos más susceptibles a presentar este riesgo alimentario.
Con
respecto a los precloratos, son las sales del ácido perclórico HClO4.
Existen cinco sales de perclorato: de magnesio, potasio, amonio, sodio, y
de litio. Son sustancias sólidas que se disuelven fácilmente en agua. A
lo largo de 2013 se han encontrado presencia de esta sustancia en
ciertos alimentos como fruta y hortaliza.
COMPARATIVO ALERTAS 2012Al
igual que en el año anterior, la contaminación biológica por
microorganismos es el riesgo que presenta mayor número de
notificaciones, seguidamente de las micotoxinas que se encuentra en
segunda posición después dos años consecutivos y dejar el primer puesto
durante varios años.
En relación a la microbiología, Salmonella
sigue siendo el microorganismo donde se ha detectado mayor número de
alertas tanto en el año 2012 como 2013.
De las alertas
encontradas en micotoxinas, al igual que el año pasado, las aflatoxinas
siguen siendo las que presentan mayor número de alertas. En el año 2013
las alertas se reparten en productos como pistacho y cacahuetes
procedentes de Turquía, principalmente. En el 2012, el alimento donde se
encontró mayor número de alertas fue en cacahuete de procedencia
asiática.
ORIGENEn relación al origen de las
alertas detectadas durante el 2013, el 81 % de las alertas tienen origen
en Europa, seguidamente de América (11%) y América (4%), habiendo
aumentado de manera considerable el porcentaje de alertas con origen en
Europa y disminuidos en otros orígenes como Asia, África o América.