El caso de los huevos
contaminados por el insecticida Fipronil ya está afectando a varios países
europeos y Hong Kong.
Este insecticida sistémico y de
amplio espectro que ataca el sistema nervioso central de las plagas es
ampliamente recomendado como antiparasitario externo y para el control de
pulgas y garrapatas.
El Fipronil está prohibido en
granjas avícolas productoras de huevos ya que está probado que se concentra en
las yemas, y si bien es un producto de moderada toxicidad, el consumo
continuado de huevos contaminados podría causar nauseas, dolores de cabeza y
estómago, y en casos graves dañar hígado, riñón y tiroides.
El uso del huevo en la industria
alimenticia es amplio tanto por su consumo directo como por el uso de sus
derivados, por ello en AGQ Labs y AgroConciencia ponemos a tu disposición el análisis de residuos de plaguicidas y análisis de Fipronil en huevos y sus
derivados para asegurar la inocuidad y calidad de tus productos.
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